Dime cuando almuerzas y te diré cuanto peso pierdes. Si lees esta frase seguramente te estarás preguntando qué importancia puede tener el horario. Al parecer mucha. De acuerdo a ciertas investigaciones, si quieres hacer dieta tendrás que tener en cuenta una nueva estrategia para adelgazar.
Hoy día, el horario de la comida no es un tema menor, el trabajo y las diferentes ocupaciones obligan (en muchos casos) a modificar los horarios de las comidas. Esto trae como consecuencia el aumento de consumo de comidas rápidas y por ende de sobrepeso, entre otras complicaciones.
No es novedad que la obesidad es considerada una epidemia, por el número de personas que la padecen a nivel mundial. El problema mayor radica en que esta enfermedad es la causa de muchas otras enfermedades graves, como cardiopatías, diabetes, dislipemias, enfermedades óseas, etc. Por ello, se realizan estudios para diseñar estrategias que sirvan para adelgazar en forma saludable. Una de las últimas estrategias estudiadas se relaciona con el horario de las comidas, más precisamente del almuerzo.
Al parecer si comes el almuerzo después de las 3 de la tarde, pierdes menos peso que si almuerzas antes de ese horario. A esta conclusión llegaron científicos de la Universidad de Murcia, Harvard y Tufts.
Esta investigación se llevó a cabo durante 20 semanas, monitoreando a 420 personas que realizaban la dieta mediterránea (recuerda que esta dieta es considerada la dieta más saludable). La mitad de estas personas comían temprano y el resto tarde. Los resultados obtenidos fueron contundentes. Aquellas personas que habían almorzado tarde, perdieron menos peso.
Este estudio es muy importante, porque pone en evidencia que, realizando pequeños cambios de hábitos es posible mejorar los resultados de las dietas para adelgazar, especialmente aquellas que son dietas equilibradas y saludables.
Planificar una dieta conlleva tener en cuenta varios aspectos, en primer lugar elegir la dieta que necesitas, seleccionar los alimentos adecuados, establecer los horarios que debes respetar; así como también la práctica de actividad física que es fundamental para aumentar el metabolismo, incrementar la capacidad aeróbica y fortalecer los músculos.
Por todas estas razones, las dietas deben ser personales y controladas por un médico o nutricionista.
Mentalidad positiva para adelgazar
Más allá de todo el esfuerzo, de la dieta, del ejercicio y de todo lo que conlleva el hecho de perder peso, podría decirse que adelgazar es una cuestión de actitud. “¿Tan fácil?”, se preguntará más de uno, y con toda razón. No sé si tanto, pero que la mentalidad influye en todo esto, no hay ningún lugar a duda. Si no hay una preparación mental en positivo, la cosa se torna muy complicada.
¿Por qué? Por una simple razón: generar una carga negativa en los pensamientos, no creer en la posibilidad de alcanzar las metas, es al fin y al cabo no creer en nosotros mismos. ¿Quién va a confiar en nuestras posibilidades de adelgazar si la cosa no comienza por uno mismo?
Por esta misma razón, siempre hay que mantener la motivación alta, el autoestima tiene que estar también arriba. Hay que quererse como uno es, pero también pensar en la posibilidad de mejorar el camino, no estancarse. Así, programándote en positivo, planteándote metas paso a paso y cumpliéndolas, verás que todo es posible.
Pensar en positivo es hacer un poco más de fuerza a la hora de cumplir lo que uno se propone, es un motor adicional, el que te dará empuje cuando te sientas sin fuerzas. Cree en ti, cree en tus posibilidades ante todo. Si tantos otros lo han logrado, ¿por qué tu no lo has de hacer? Vamos, ese ánimo bien arriba y a comenzar con tu dieta cuanto antes.
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4 Trucos prácticos para perder peso en tu alimentación
A veces, pasamos por alto los detalles y son justamente estos los que terminan haciendo la diferencia en más de una ocasión. Cuando se trata de perder peso, lo mismo sucede. Partiendo de algunas cosas que pueden parecer mínimas en tu alimentación diaria, favorecerás notablemente el adelgazamiento y también te ahorrarás calorías. ¿Quieres algunos buenos trucos? Pues entonces no tienes más que leer este artículo.
Estos son algunos buenos trucos prácticos para perder peso desde la alimentación:
Empieza a usar más salsa de soya: Saboriza, realza el gusto y es un gran sustituto del aceite. Puedes emplearla para lubricar ensaladas sin tener que abusar de la sal y el aceite, mezclándola con un poco de zumo de limón. También para sofritos y salteados es maravillosa.
Añade fibra a tu alimentación: Además de comer muchas verduras y frutas ricas en fibra, puedes valerte de algunos trucos más que sencillos. Una cucharada de semillas de chía o de lino molidas, mezcladas en un batido, sopa o yogur, te aportarán mucha fibra y excelentes propiedades.
Bebe mucha agua e infusiones: Aunque quizás ya suene algo redundante, no dudes en beber mucha agua por día. Y tampoco te olvides de infusiones como el té verde, que te hidratan y te ayudan a perder peso con sus propiedades.
Usa papeles absorbentes: Los papeles o toallas absorbentes de papel son geniales para extraer calorías de las comidas. Un pequeño momento que apoyes algún preparado que hayas hecho con aceite o grasa, por más light que parezca, el papel puede ayudarte a quitarle aún más calorías de esos lípidos que quedan adheridos a la superficie.
Las dietas para adelgazar y la anemia
Entre lo saludable y no saludable puede haber una delgada línea, y un claro ejemplo de ello son las dietas para adelgazar. Estas pueden ayudarte a prevenir complicaciones severas o pueden ser la causa de enfermedades que pueden perjudicar tu salud, como por ejemplo la anemia. La anemia, puede pasar desapercibida y confundirse con cansancio propio del exceso de trabajo, pero en realidad es una enfermedad que debe ser tenida muy en cuenta, y que puede ser consecuencia de perder peso.
La anemia es una enfermedad que se caracteriza por un volumen bajo de glóbulos rojos o eritrocitos, esta puede producirse por diferentes causas, una de ellas es una dieta para adelgazar inadecuada y restringida.
Los glóbulos rojos son los encargados de transportar oxígeno y glucosa a todas las células del cuerpo. Si la cantidad de eritrocitos en baja, la cantidad de oxígeno y glucosa será también baja. Por ello, aparecen los síntomas de cansancio, fatiga y apatía, característicos de la anemia.
Si necesitas perder peso y realizas una dieta desequilibrada por mucho tiempo, puede producirte un déficit de distintos nutrientes como el hierro y la vitamina B12; principios activos que ayudan a formar los glóbulos rojos. Es decir que sí, las dietas restringidas pueden provocarte anemia, sin darte cuenta.
A través de los alimentos tu cuerpo obtiene la mayoría de los nutrientes, por ello sino comes adecuadamente tu organismo se reciente y puedes sufrir anemia.
Por ello, si quieres adelgazar ¡hazlo!, pero en forma equilibrada, saludable y controlada; especialmente si eres mujer, ya que son más propensas a padecer anemia.
Fuente aperderpeso.com
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